La Casa de los Coroneles es un edificio señorial construido en el transcurso de la Edad Moderna que se encuentra emplazado en el municipio de La Oliva, isla de Fuerteventura.
Es una edificación que destaca especialmente por sus magnitudes arquitectónicas y por el significado histórico que representa no sólo para Fuerteventura sino también para el Archipiélago Canario como la continuidad de un sistema de gobierno que hunde sus raíces en la Edad Media. La misma se alza en medio de un extenso llano que está delimitado por el Lomo del Pájaro, la Montaña del Frontón, la Montaña de Escanfraga, y el Volcán de la Arena, origen del malpaís de mismo nombre, quedándole, en última instancia el caserío de La Oliva al Sur. El complejo cívico-militar comprende varios espacios, todos interconectados entre sí, y al servicio de una familia que regentaba los futuros de una isla. De manera que la Casa de los Coroneles fue cimentada en la segunda mitad del siglo XVII bajo los auspicios de la familia Cabrera Béthencourt, atribuyéndosele su construcción a Ginés de Cabrera Béthencourt (1650-1722), pero continuando la obra sus descendientes, en particular su nieto, Agustín Cabrera Béthencourt Dumpiérrez (1743-1828), quinto coronel de la Isla.